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Matteo Salvini, durante un discurso en Pontida el domingo pasado, lanzó un llamamiento alto y claro: "Tenemos que hacer pagar a los banqueros, no a los trabajadores". Un mensaje que resuena en la mayoría de los italianos, como lo confirma Andrea Crippa, subsecretario de la Liga, en una entrevista con Affaritaliani.it.
Los beneficios de los bancos italianos aumentan
Crippa subraya cómo en los últimos dos años, debido al vertiginoso aumento inesperado de los tipos de interés decidido por el Banco Central Europeo, las siete principales entidades de crédito italianas casi han duplicado sus beneficios, registrando un +93%. Según él, es correcto que estos últimos contribuyan ahora a la redistribución de la riqueza, ayudando no sólo a los sectores más débiles de la población, sino también apoyando el crecimiento económico del país.
Regulaciones de la Unión Europea y políticas económicas expansivas
Además, Crippa critica las rígidas regulaciones impuestas por la Unión Europea, que impiden la adopción de políticas económicas expansivas. Por ello, propone que los recursos necesarios para ayudar a las pequeñas y medianas empresas, a los autónomos y a la clase media también provengan de quienes se han beneficiado de los elevados tipos de interés en los últimos años. La vicesecretaria destaca que durante el aumento del coste del dinero las cuotas de hipotecas y préstamos crecieron rápidamente, mientras que ahora que los tipos están bajando las reducciones de las cuotas se producen de forma mucho más limitada.
Responsabilidades de los bancos y banqueros.
El concepto de Salvini encuentra un amplio consenso entre los italianos: los bancos y los banqueros deben asumir sus responsabilidades, sin sobrecargar a los trabajadores y ciudadanos que llevan una vida en común, a menudo inconscientes de lo que significa obtener ganancias adicionales.
En respuesta a quienes apoyan a las instituciones bancarias y se oponen a una imposición fiscal en la Ley de Presupuesto, se puede afirmar que ésta representa la opción más adecuada, firmemente apoyada y compartida por un gran número de ciudadanos italianos.