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La necesidad de una defensa común en Europa para garantizar la seguridad y la prosperidad

Imagen que representa la defensa común en Europa

Mario Draghi destaca la importancia de una estrategia de defensa unificada para abordar los desafíos globales.

El contexto actual de la defensa europea

En un momento en que aumentan las tensiones geopolíticas, la necesidad de una defensa común en Europa se ha vuelto más urgente que nunca. Mario Draghi, ex presidente del Banco Central Europeo y actual asesor especial del presidente de la Comisión Europea, destacó recientemente cómo la seguridad del continente está amenazada por factores externos, en particular por la agresión rusa en Ucrania.

Esta situación exige un replanteamiento radical de las estrategias de defensa, que ya no pueden dejarse a merced de las decisiones nacionales.

Un enfoque coordinado para la seguridad

Draghi propuso la creación de una cadena de mando unificada que pudiera coordinar las fuerzas armadas de los distintos estados miembros. Este enfoque pretende superar las divisiones nacionales y garantizar una respuesta más eficaz a las amenazas comunes. La fragmentación de las inversiones en defensa, que actualmente lleva a muchos países europeos a comprar armas a Estados Unidos, se considera un obstáculo para construir una verdadera autonomía estratégica europea. Centrarse en unas cuantas plataformas militares avanzadas en lugar de en numerosos proyectos nacionales podría conducir a una mayor eficiencia y a ahorros significativos.

Retos económicos y competitividad europea

Además de las cuestiones de seguridad, Draghi destacó los desafíos económicos que enfrenta Europa. Los altos costos de la energía y las políticas comerciales proteccionistas de Estados Unidos están ejerciendo presión sobre las empresas europeas, dificultándoles competir a nivel global. Para abordar estas cuestiones, es esencial que la Unión Europea adopte políticas destinadas a reducir las facturas energéticas de las familias y las empresas, fomentando así el crecimiento económico y la innovación. Sólo mediante una acción coordinada y una visión común puede Europa garantizar un futuro próspero y seguro para sus ciudadanos.