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Milán duplica las áreas de siega reducidas para proteger la biodiversidad

Áreas verdes en Milán dedicadas a la siega reducida

Iniciativa del Municipio para aumentar las áreas verdes y promover la biodiversidad en la ciudad.

Un aumento significativo de las áreas verdes

Milán ha decidido duplicar las superficies de siega reducidas, pasando de 54 a 111 espacios verdes. Esta opción estratégica pretende promover la biodiversidad, un tema cada vez más central en las políticas medioambientales de las ciudades modernas. Las nuevas áreas, distribuidas por los Municipios, cubren una superficie total de aproximadamente 1,8 millones de metros cuadrados, un aporte significativo a los 19 millones de metros cuadrados de verde urbano gestionados por el Municipio.

La concejala de Medio Ambiente, Elena Grandi, destacó la importancia de estos espacios para la salud ecológica de la ciudad.

Las controversias y las respuestas de la administración

Aunque la iniciativa fue bien recibida por muchos ambientalistas, ha habido polémica por parte de la ciudadanía respecto a la gestión de estas áreas. Algunos residentes se han quejado de la presencia de hierba alta y vegetación descuidada, lo que según ellos compromete la estética y la funcionalidad de los espacios públicos. En respuesta, Grandi aclaró que las áreas de corte reducidas no se eligieron cerca de condominios, sino en zonas estratégicas para minimizar el impacto visual y práctico. Sin embargo, la percepción de junglas metropolitanas ha planteado interrogantes sobre la gestión del verde urbano.

Beneficios para la biodiversidad y la comunidad

Las áreas con siega reducida no sólo contribuyen a la biodiversidad, sino que también brindan numerosos beneficios a la comunidad. Estos espacios pueden convertirse en hábitats para diferentes especies de insectos, aves y plantas, creando un ecosistema urbano más rico y variado. Además, reducir el mantenimiento regular ahorra dinero y tiempo, que pueden reinvertirse en otras iniciativas ecológicas. La presencia de parterres con árboles y plantas autóctonas también puede mejorar la calidad del aire y contribuir a un microclima más favorable.